La normativa española establece que todos los menores que miden menos de 135 centímetros de altura deben viajar siempre en un sistema de retención infantil adecuado a su edad y peso. Se trata de una manera de velar por su bienestar y seguridad en los trayectos por carretera. ¿Cumples con esta norma cuando llevas niños en tu coche?
Son sistemas muy fáciles de instalar y resultan efectivos para reducir el riesgo de que los niños sufran lesiones de carácter grave e incluso mortales. En estos momentos hay en vigor dos normativas en lo que respecta a la homologación de sillas infantiles, ambas en marcha desde el año 2018. De todo ello te hablamos en las siguientes líneas.
Cuando hablamos del sistema de retención para niños nos referimos a lo que en términos coloquiales se llama la silla de coche o la sillita infantil. Se trata de un dispositivo que se coloca en los vehículos para que los menores vayan sujetos y seguros. Debes colocarlo en alguno de los asientos traseros de tu coche, nunca en el del copiloto.
Existen diferentes sistemas de retención infantil, en función de la estatura del niño y su peso. Estas son las más habituales:
Todos los menores con una altura de 135 centímetros o menos deben utilizar siempre un sistema adaptado a su altura y peso y que, por supuesto, esté homologado. La Ley de Tráfico y Seguridad Vial en vigor en la actualidad establece que los agentes pueden inmovilizar un vehículo si los niños no van bien sentados. El uso de estos dispositivos reduce en un 90 % las lesiones y un 75 % las muertes.
Las sillas del grupo 0+ siempre debes colocarlas en sentido contrario a la marcha para ofrecer la máxima protección de la columna, el cuello y la cabeza. Los sistemas del grupo 1 se fijan al asiento del vehículo a través del ISOFIX o cinturón de seguridad.
El grupo 2 y 3 hace referencia a los asientos y cojines elevadores. Están pensados para el momento en el que los menores son demasiado grandes para una silla y pequeños para el cinturón de seguridad.
Hay cuatro grupos según la estatura y la edad: de 0 a 13 kilos (hasta los 18 meses), de 9 a 18 kilos (de 1 a 4 años), de 15 a 36 kilos (de 4 a 12 años) y a partir de 135 centímetros (más de 12 años).
Existen dos maneras de sujetar la silla en el coche: con el cinturón de seguridad o a través del sistema ISOFIX. Este último se compone de tres puntos. Dos están ubicados entre el asiento del vehículo y el respaldo, y la silla se conecta a ellos por la parte posterior de la base. El tercer punto de anclaje sirve para que la silla no rote en caso de impacto.
El sistema de retención infantil homologado hay que instalarlo siempre en el asiento trasero del vehículo.
En España, llevar instalada una silla infantil en el asiento delantero conlleva una sanción económica de 200 euros y la retirada de tres puntos del carnet de conducir. Se trata de una de las multas de coche más frecuentes.
Por último, es esencial destacar que el sistema de retención infantil esté adaptado a la talla y peso de los menores. Y tú, ¿cumples con la normativa vigente a la hora de viajar con tus hijos en el coche?