La retrorreflexión es esa cualidad que te permite ver las señales de tráfico por la noche, así como los paneles sobre las autopistas y la señalización horizontal. ¿Sabías que no tienen el mismo coeficiente de retrorreflexión las señales ubicadas en las zonas urbanas, periurbanas o las carreteras? ¿Y que las señales deben ser fabricadas de una forma muy minuciosa para que cumplan unos ciertos parámetros físicos? Cuando se cuidan estos detalles, las señales te permiten conducir con seguridad y de la manera más fácil posible en zonas poco iluminadas.
Es la capacidad que tiene una señal de tráfico para reflejar la luz que emiten los vehículos sin que importe el ángulo de incidencia de dicha luz. Esto último distingue a esta cualidad de la reflexión que produce, por ejemplo, un espejo. Es una característica muy importante, ya que las señales de tráfico deben reflejar la luz de una forma difusa para que esta no cause un deslumbramiento.
La retrorreflexión se relaciona con estos tres parámetros:
Estos parámetros se pueden medir mediante los retrorreflectómetros y retroflexómetros.
Es importante medir este parámetro periódicamente en las señales. Esto se debe a que la retrorreflexión se puede alterar con el paso del tiempo y debe estar siempre como marcan los estándares. Las señales se deterioran, principalmente, como consecuencia de los factores ambientales. En las inspecciones periódicas se comprueba que el coeficiente sigue siendo el que marcan las normas, como veremos más adelante.
¿Cómo se consigue un efecto de reflexión sin deslumbrar? Los materiales que se usan para las señales de tráfico retrorreflectantes deben incorporarse en el proceso de fabricación. Se suelen utilizar los siguientes:
Es importante que la totalidad de la superficie sea retrorreflectante; no solo el fondo de la señal, sino también la orla, los caracteres, símbolos, pictogramas, etc.. Las únicas partes no retrorreflectantes deben ser las de colores negro, gris oscuro o azul.
Con las nuevas tecnologías, es posible conseguir varios tipos de superficies retrorreflectantes, que se diferencian fundamentalmente por su coeficiente de retrorreflexión. La norma 8.1.IC de señalización vertical establece tres clases de señales con retrorreflexiones:
Además, existen dos clases diferentes de señales según su coeficiente de retrorreflexiones, la RA2 y la RA3. La norma 8.1.IC indica cuál es la retrorreflexión mínima que se utiliza en las carreteras, según la zona en que se encuentren las señales (carretera convencional, zona periurbana o autovía y autopista):
En las últimas décadas, se han utilizado cada vez más las señales retrorreflectantes de tráfico. Esto se debe a las numerosas ventajas que presentan frente a las señales luminosas:
Lo importante, como ya sabes, es que la retrorreflexión de pinturas para señalamiento horizontal y vertical permite que las señales sean bien visibles, evitan accidentes y proveen información útil para que sepas hacia dónde has de dirigirte conduciendo para llegar a tu destino. También te proporcionan cualquier aviso relevante.