La mujer ingeniera lleva aportando ideas y soluciones desde hace siglos. Hoy, 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, es importante recordar sus méritos. Su aportación ha sido relevante en todos los ámbitos y merece la pena recordarlo más allá del Día de la Mujer Ingeniera, que se celebra el 23 de junio. ¿Quiénes han destacado en la ingeniería? Ten estas 10 mujeres ingenieras muy en cuenta.
Pese a que su peso en el ámbito de las ciencias sigue siendo poco reconocido, las mujeres han contribuido en gran medida a su desarrollo. Y la ingeniería no ha sido una excepción. Existen una gran cantidad de ejemplos que demuestran sus amplias capacidades para el sector de la ingeniería a través de las aportaciones que han hecho.
Emily Roebling participó en algunos de los proyectos de ingeniería más ambiciosos de su tiempo. Esta estadounidense asumió la supervisión diaria del levantamiento del célebre puente de Brooklyn. La iniciativa corrió a cargo de su suegro, un pionero de la construcción, y su marido heredó este proyecto.
Gracias a esta oportunidad, Roebling aprendió a efectuar cálculos y conoció a fondo la resistencia de los materiales, lo que le convirtió en una de las mejores profesionales de su época. Fue la primera mujer ingeniera jefa a pie de obra de la que se tiene constancia y dirigió la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles.
Se la conoció como Lady Edison, y fue una de las grandes inventoras del siglo XIX. Desarrolló 28 patentes, muchas de ellas relacionadas con la máquina de coser. Fue la inventora de la máquina de coser en zigzag, una máquina que sellaba los bordes de la costura, haciendo la prenda mucho más resistente. Contaba con unas excelentes habilidades mecánicas, lo que le permitió sacar a su familia de la pobreza.
Mary Anderson fue la inventora del limpiaparabrisas, una parte tan común de nuestros vehículos que no nos paramos a pensar en su gran importancia. Durante un viaje a Nueva York en 1903, observó que los conductores de tranvías y automóviles abrían sus ventanas porque no podían ver a causa de la lluvia. ¿Cuál fue su solución?
Pensó en un método que permitiera una buena visibilidad durante la conducción en los días de nieve o lluvia. Se trataba de un brazo metálico basculante que llevaba incorporada una lámina de goma y era accionado de modo manual desde dentro del vehículo por el piloto o su acompañante a través de una palanca.
Se la considera la madre de la ingeniería ambiental por sus estudios de la calidad del agua en Massachusetts. Fue la primera mujer en entrar en el prestigioso MIT (Massachusetts Institute of Technology) para estudiar Química, aunque no consiguió el doctorado porque los profesores no querían que el primer doctorado en esta disciplina fuera para una mujer.
Acuñó el término «higiene ambiental», la base que sustenta la ecología moderna. También desarrolló varios métodos de análisis que se siguen utilizando en la actualidad.
Actriz, ingeniera de telecomunicaciones e inventora, Hedy Lamarr inventó un sistema de comunicaciones denominado Técnica de Transmisión en el Espectro Ensanchado. Esta sería la base de las tecnologías inalámbricas de larga distancia de la actualidad.
Junto con el compositor George Antheil, desarrolló al comienzo de la Segunda Guerra Mundial la patente de un sistema de radio que permitiría ayudar al bando aliado venciendo las interferencias provocadas por el bando contrario. Aunque finalmente no se adoptó esta tecnología, su trabajo se unió a la futura tecnología Bluetooth.
Esta británica fue la que asentó los pilares fundamentales de las ciencias de la computación actuales. A pesar de que en el siglo XIX no era frecuente que las mujeres estudiaran ciencia, Ada tuvo la suerte de contar con grandes maestros, como el matemático Augustus De Morgan o la astrónoma escocesa Mary Somerville.
Fue precisamente Sommerville quien le presentó al matemático Charles Babbage, con quien trabó una gran amistad y una fructífera colaboración. Trabajó junto al matemático Charles Babbage en el desarrollo de una máquina analítica que ejecutaba programas y le permitía efectuar todo tipo de cálculos.
Margaret Hamilton fue una visionaria de la programación informática. Su trabajo fue tan importante que permitió poner a Neil Armstrong en la Luna, evitando el desastre durante el aterrizaje del Apolo XI.
Cuando el módulo lunar estaba descendiendo, el ordenador a bordo se sobrecargó. El programa que supervisaba el funcionamiento de la computadora había sido diseñado por Hamilton y su equipo. Según sus propias palabras: “Si el ordenador no se hubiera diseñado para recuperar errores, dudo que el Apolo hubiera aterrizado en la Luna”. Pero lo hizo.
Además de ser la primera alcaldesa de Bilbao, Pilar Careaga destacó por haber sido la primera mujer ingeniera industrial de España. Se licenció en Ingeniería Industrial en la Escuela Superior de Ingenieros Industriales de Madrid con 21 años.
En el último año de sus estudios en la facultad siguió la asignatura de ferrocarriles y realizó prácticas como maquinista de tren, convirtiéndose en la primera mujer que condujo un tren en España. Para celebrar su hito, su promoción se bautizó con su nombre. Sin duda, todo un ejemplo para las mujeres que la siguieron.
Beulah Louise desarrolló 110 invenciones y registró 49 patentes, lo que la convierte en la inventora más prolífica de la Historia. Una de sus principales aportaciones fue una máquina de hacer helados que incluía una cámara congeladora rodeada por una estructura aislante. Gracias a esto se alcanzaba gran rapidez en la fabricación con mínimo gasto de hielo, además de servir para enfriar agua.
Durante la década de 1930, su creatividad innovadora abordó un nuevo campo, relacionado en esta ocasión con el trabajo de oficina. Inventó el protógrafo, con el que podían hacerse simultáneamente hasta cuatro copias mecanografiadas de un mismo documento sin necesidad de emplear papel carbón o acudir a la multicopista. Era el precursor de la fotocopiadora actual.
Clarke fue la primera mujer en graduarse en Ingeniería Eléctrica en el prestigioso MIT (Massachusetts Institute of Technology). Tras este logro, trabajó para la General Electric, en la que desarrolló la que se denominaría calculadora Clarke, que se utilizó para resolver cálculos para trazar la línea de transmisión energética.
Además, en 1954 recibió el principal premio de la organización Society of Women Engineers, el cual reconocía sus contribuciones originales. En febrero de 1926, Clarke fue la primera mujer en presentar una ponencia en el Instituto Estadounidense de Ingenieros Eléctricos. En esta ponencia propuso los circuitos equivalentes para la solución de problemas de estabilidad en los sistemas eléctricos.
En definitiva, la mujer ingeniera ha tenido un papel muy relevante a lo largo de la Historia, aunque no siempre reconocido. Estas 10 ingenieras son solo algunos ejemplos, pero hay muchas más, cuyo trabajo ha quedado reflejado en nuestro día a día.
