La movilidad como servicio (Mobility as service, MAAS) facturará en 2027 en Estados Unidos más de 52 mil millones, según un informe de Juniper Research. ¿Cómo se explica que en ocho años un sector tan específico vaya a lograr un crecimiento tan enorme? ¿En qué consiste este servicio? ¿Cómo está modificando ya las grandes ciudades estadounidenses y del continente asiático?
Una alternativa bajo demanda que te permite elegir el servicio de movilidad que prefieras en cada momento. El operador ofrece opciones como el transporte público, el viaje compartido en coche o en motocicleta, el alquiler de un coche o un servicio de taxi o de vehículo con conductor.
Lo mejor es que usando una aplicación podrás elegir todas las opciones que quieras realizando un único pago. Solo tienes que introducir el trayecto que necesitas hacer y el sistema te sugiere todas las alternativas para que llegues lo antes posible.
El objetivo es reducir el uso del vehículo privado y promover la sostenibilidad. Además, también se consigue aligerar el tráfico y la cantidad de viajeros dado su asequible precio.
Es imprescindible relacionar todo lo anterior con la intermodalidad en el transporte de viajeros. Los intercambiadores se crearon para que puedas pasar de un autobús a un tren o a un metro fácilmente. Los creadores de esta idea partieron de ese concepto en 1996 cuando comenzaron a darle forma a su proyecto. En 2014 decidieron probar el sistema en Suecia y desde el año siguiente han ido desarrollando, siguen haciéndolo de hecho, un concepto con cada vez más adeptos.
Se espera que sea a partir de 2021 cuando el número de usuarios crezca de forma exponencial. Y es que la extensión de la red 5G influye, directamente, en la velocidad de la transmisión de datos móviles, y con ello se mejora el acceso a este tipo de transporte.
Conectarte desde tu teléfono móvil a la plataforma y conocer, en tiempo real, dónde se encuentran los distintos vehículos que puedes usar provocará que esta alternativa deje de serlo para pasar a ser una forma de transporte con mayor popularidad.
Por lo tanto, la tecnología juega un papel fundamental en la movilidad como servicio y también en la micromovilidad, otra tendencia muy relacionada con las nuevas formas de movernos en la actualidad.
La consecuencia directa del avance de la tecnología provocará que el transporte público sea una de las alternativas incluidas en el servicio que se viene describiendo. La red de autobuses urbanos de las grandes ciudades se controla por GPS. La de metro permite saber el tiempo exacto que tarda cada tren en llegar a una estación determinada.
En ambos casos se aboga ya por la instalación de sistemas sin conductor que permitan evitar los atascos de tráfico, acelerar el ritmo de la circulación y, sobre todo, colaborar para absorber al mayor número posible de viajeros en las horas más complicadas.
Sirva el siguiente ejemplo para confirmar la importancia del transporte público en este proceso de renovación. Si has ido a Nueva York es bastante probable que te hayas desplazado en metro, taxi e incluso en ferry, pero no en autobús, dado su complicado horario y su lentitud. ¿Por qué en Barcelona, que tiene el mismo diseño urbanístico, sí funciona este tipo de transporte y no en la Gran Manzana? Porque se prefieren otras alternativas.
Pues bien, en verano de 2021 la Metropolitan Transportation Authority (MTA) ha decidido incluir el metro, la red de taxi y los autobuses neoyorquinos como parte de su servicio de MAAS. Incluso están probando un sistema patentado por Intel para poder controlar su circulación sin conductor.
Lo mismo está sucediendo en otras ciudades estadounidenses, en las más pobladas de Asia y en las grandes capitales europeas. Además, se ha diseñado una única aplicación en tu idioma para que se conecte automáticamente a la plataforma del país en el que te encuentres sin que tengas que hacer ningún tipo de cambio en tu teléfono.
Súmale al ahorro energético el de tiempo y dinero para tomar la decisión final al respecto. Mostrando tu teléfono en cada vehículo será suficiente para cruzar una ciudad en minutos. Sin duda, la idea no ha tardado en conquistar a miles de viajeros.
El despliegue del servicio en España se espera que sea pleno en 2030. A lo largo de 2022 comenzará a implantarse en las grandes ciudades. Solo así se podrá comprobar sus resultados y su aceptación por parte de los viajeros. A día de hoy, en ciudades como Madrid y Barcelona este tipo de transporte ya tiene una importante presencia.
Lo que queremos subrayar es que lo que comenzó como una apuesta por la ecología va a terminar siendo una opción más en las ciudades más importantes del mundo. El auge de los vehículos eléctricos, de la red 5G y de la conciencia del respeto por el medioambiente es esencial para que la movilidad como servicio se convierta en realidad antes de lo que piensas en tu ciudad.
