En España se enseña que el agua subterránea es la que se encuentra bajo la superficie terrestre y ocupa los poros y las fisuras de las rocas más sólidas. Además, el agua subterránea puede aparecer en la superficie en forma de manantiales, o puede ser extraída mediante pozos.
Los túneles de la Calle 30, ocupan el lugar de tierras que han sido excavadas y que han estado en contacto con el lecho de un río, el Manzanares. Ya desde su construcción, el agua subterránea se ha hecho presente para convivir con él para siempre.
Excavación del túnel durante su construcción febrero 2007
Finalizada la construcción de los túneles, el agua subterránea y la que se filtra desde el río Manzanares, sigue buscando su camino y tiende a ocupar el hueco que hay en el interior que encierran sus muros y pantallas.
El aporte de agua es continuo y se hace necesario transportarlo hasta la red de saneamiento de la ciudad que está varios metros por encima y fuera del túnel. Esto sólo se puede conseguir con el trabajo de bombas para agua.
Bomba de drenaje sumergible y drenajes en pozos
Por razones de redundancia y mantenimiento, en cualquier depósito se encontrarán más de una unidad trabajando coordinadas, lo que llamamos pozos de drenaje. El funcionamiento es plenamente autónomo y automatizado mediante sensores de nivel que interpreta un autómata reaccionando según sus indicaciones.
Más algoritmos vigilan el comportamiento de estos equipos en el centro de control para que su funcionamiento se mantenga incansable las 24h todos los días del año. En los libros de las próximas generaciones deberá hacer la salvedad de que el agua subterránea es la que se encuentra bajo la superficie terrestre, excepto en los túneles de la Calle 30.