Ir en bicicleta puede parecer más seguro que coger el coche o la moto porque te desplazas a menor velocidad. No olvides que en bici, ante un accidente el chasis eres tú y lo mejor que puedes hacer en este caso es saber cómo evitar accidentes en bicicleta. En los últimos años, son muchos los accidentes en los que han resultado involucrados ciclistas. Apuesta por la seguridad y evita situaciones peligrosas.
Las recomendaciones de seguridad durante la pandemia han disparado el uso de la bicicleta frente al taxi, que ha descendido. Esto ha hecho que solo en la ciudad de Madrid los accidentes en bicicleta hayan aumentado un 37 %. Si realmente quieres que este sea un medio de transporte seguro, te recomendamos seguir estos consejos.
Legalmente, el casco solamente es obligatorio para los ciclistas que circulen fuera del poblado y los niños y jóvenes menores de 16 años. Recomendamos llevar el casco siempre y para todos los miembros de la familia.
No olvides que las bicicletas también han de respetar los semáforos, las direcciones de circulación y demás normas y señales, ¡puedes recibir una multa si no lo haces!
Lo mejor es utilizar ropa ajustada, ligera y que te permita moverte fácilmente. Presta atención también al calzado: es importante que se adhiera bien al pedal y a tu pie.
Igual que la intención de la ITV obligatoria para los coches es que los vehículos estén en buen estado para evitar accidentes, también lo debe estar tu bicicleta.
Además de proteger a los peatones, esto te permitirá ser más visible para los coches. De esta forma, tendrás espacio suficiente para apartarte, si es necesario, cuando un coche te adelante guardando poca distancia de seguridad. Naturalmente, esto no significa que vayas por en medio del carril.
Ten en cuenta que, si un coche te sigue demasiado de cerca, bastará una frenada brusca o pequeña disminución de velocidad para sufrir un accidente grave o mortal.
Revisa los mapas e infórmate de los carriles bicis que hay en tu trayecto. Incluso aunque impliquen un pequeño desvío, puede que llegues antes a tu destino puesto que suelen estar despejados y, lo más importante, son el camino más seguro, ¡síguelos!
Fíjate en lo que hacen los conductores y anticípate a sus acciones para evitar posibles accidentes.
Desgraciadamente, conviene también estar preparado para los conductores que no cumplen las normas. Puede que no utilicen los intermitentes en las rotondas, se salten un stop… hay que estar preparado para todo y con los sentidos siempre alerta.
Si no tienes más remedio, lleva las luces siempre contigo y, a ser posible, también un chaleco reflectante. Sobre todo en invierno, cuando los días son más cortos y repentinamente se hace de noche.
Piensa que los conductores de otros vehículos también lo tienen difícil cuando han de pasar cerca de un ciclista, no lo hagas más difícil y déjales el espacio que necesitan, no les bloquees el paso y marca siempre los cambios de dirección.
Presta atención a las siguientes recomendaciones y evita cualquier imprevisto que te haga sufrir un accidente:
Como ves, no es nada difícil respetar las normas y conducir en bicicleta con seguridad, ¡así que no hay excusas! Protégete ante posibles accidentes y evita situaciones de riesgo.