Una de las dudas más extendidas sobre los vehículos tiene que ver con la caducidad de los neumáticos, y es que debido a su gran durabilidad es habitual que te olvides de ellos. Lo que seguramente tengas claro es que se trata de una parte del coche sumamente importante. No en vano, es el primer contacto con el asfalto y el garante de la adherencia y de la resistencia. Debes revisar cada cierto tiempo el estado de los neumáticos y reparar en ciertos aspectos para tener la máxima confianza en la respuesta del vehículo.
Ha llegado el momento de resolver la gran duda sobre si las ruedas tienen una fecha de vencimiento: ¿cuándo caducan los neumáticos? Los neumáticos no tienen un tiempo de vida útil determinado y esto, en parte, es lógico, puesto que existen muchos tipos de neumáticos y diferentes estilos de conducción. Por tanto, la única normativa para ellos es la homologación que se recoge en la Directiva 92/23/CEE del 31 de marzo de 1992.
Cuentas con varias señales que te alertan de forma evidente del uso que les estás dado. Lo prioritario es que conozcas los aspectos que indican que ya es hora de reemplazar las ruedas.
Para saber cuándo se debe cambiar un neumático hay que tener en cuenta que son muchos los factores que intervienen, empezando por el coche y su estado, así como su peso, el estado de la calzada o la temperatura a la que están expuestos. A pesar de ello, algunos organismos advierten que a partir de los 10 años comienzan a sufrir las consecuencias del tiempo, y aconsejan llevar a cabo, una vez al año, las siguientes comprobaciones:
Ya hemos comentado que hay quien recomienda el cambio cada 10 años. Sin embargo, para poder afirmarlo es necesario conocer su fecha de fabricación. Este dato lo facilita el código DOT (Departament of Transport).
Se trata de una cifra de 4 dígitos que hace referencia a la semana y al año de fabricación del neumático. Pese a que puede darse el caso de que no coincida con la fecha en la que comenzaron a ser utilizados, puede serte de gran ayuda para conocer la vida de la rueda.
Como ves, es muy sencillo comprobar el estado de los neumáticos. A pesar de que no existe una fecha de caducidad de los neumáticos, es posible realizar una estimación de su estado. Atendiendo a los signos de desgaste y a su fecha de fabricación resulta mucho más fácil saber si ha llegado el momento de sustituir las ruedas y disfrutar de una conducción segura.